Al día siguiente, vino el guía con cuatro caballos para llevar el equipaje al profesor y sobrino. Después de recorrer unas millas llegaron a una casa donde descansar, según Axel estaba algo destartalada, los que vivían allí apenas tenían lo básico para sobrevivir. En la actualidad sigue habiendo personas que viven así y sin embargo yo pienso que pueden ser más felices que otras personas que tienen todas las comodidades, ya que poseen otra cultura que les hace ser felices de este modo.
Anduvieron algunas millas más y pasaron la noche en casa de un cura, cerca del volcán, esperando con mucha incertidumbre, realizar la importante expedición.
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